Defensora de los derechos de la naturaleza, la jurista española Teresa Vicente Giménez fue reconocida con el Goldman Prize 2024, el “Nobel del medioambiente”, por impulsar la primera ley en Europa que otorga derechos a un ecosistema. Directora de la Cátedra de Derechos Humanos y Derechos de la Naturaleza de la Universidad de Murcia, trabaja por crear un nuevo paradigma de justicia ambiental.
Proveniente de una familia de abogados, creció colándose en el despacho de su papá. En 1981, seis años después de la muerte del dictador Franco, ingresó en la Universidad de Murcia. Con un camino abierto a la democracia social, estudió nuevas leyes progresistas, pero ninguna de ellas contemplaba algo que para Teresa era fundamental: ¿dónde estaban los derechos de la naturaleza?
Empezó a ejercer a los 23 años y en 1992 se doctoró con la tesis «Justicia y derecho ambiental, para un modelo de justicia ecológica». Activista tanto en el mundo académico como en el jurídico, apoyó y brindó asesorías a la asociación Plataforma de Afectadas por la Hipoteca en España. Investigó los crímenes de estado perpetrados en Argentina y Chile. Entró en contacto con movimientos mundiales de reivindicación de los derechos de la naturaleza y antinucleares.
En 2020 Teresa impulsó una Iniciativa Legislativa Popular para que el Mar Menor -la laguna salada más grande de Europa, situada en la costa de la Región de Murcia- se convirtiera en el primer espacio natural del continente en tener personalidad jurídica, o sea, en ser reconocido como un “sujeto de derechos” para así garantizar “su protección para las generaciones futuras”.
Bajo su liderazgo, en menos de un año se juntaron más de medio millón de firmas para que el proyecto fuera tramitado en el Congreso de los Diputados y el Senado. En 2022, se publicó la «Ley para el reconocimiento de personalidad jurídica a la laguna del Mar Menor y su cuenca» que permitirá que todos los ciudadanos puedan “exigir ante los tribunales la reparación a los responsables de los daños producidos en la laguna”.