Sus estudios teóricos y observacionales de las nebulosas, aquellos gases que rodean a las estrellas, le han valido el reconocimiento internacional en el campo de la astronomía. Silvia Torres Castilleja comenzó a interesarse por la comprensión del universo en su etapa escolar. Animada por una profesora, comenzó a inclinarse por la matemática, la física y la química. Entró a estudiar en 1958 a la Facultad de Ciencias de Universidad Nacional Autónoma de México, donde el curso de Astrofísica terminó por convencerla de que lo suyo eran el espacio y las estrellas. Se convirtió en asistente de investigador en el Observatorio Astronómico Nacional y luego obtuvo una beca para doctorarse en Astronomía en la Universidad de California, con lo que hizo historia en su natal México, ya que se convirtió en la primera mujer en obtener dicha distinción en esa disciplina.
De regreso en su país, Silvia se reincorporó a la UNAM para realizar su investigación de posdoctorado en el Instituto de Astronomía, donde comenzó a analizar el espacio interestelar y la composición química de sus gases. Su trabajo ha contribuido a entender cómo se modifica el gas de las galaxias según los cambios que sufren las estrellas, descubrimiento que ha dado pistas sobre la evolución química de la Vía Láctea y de otras galaxias, así como de la formación del universo.
Silvia ha sido pionera en usar telescopios integrados a satélites y por obtener tiempo en el Observatorio Espacial Explorador Ultravioleta Internacional y en el Telescopio Espacial Hubble de la NASA.
En 2015 volvió a hacer historia al convertirse en la primera latinoamericana, y segunda mujer, en presidir la Unión Astronómica Internacional, organismo que agrupa a más de 12.000 miembros alrededor del globo, y que promueve la investigación y difusión de la astronomía mediante la cooperación astronómica a nivel mundial.
Investigadora emérita del Instituto de Astronomía y del Sistema Nacional de Investigadores, en 2007 ganó el Premio Nacional de Ciencias y Artes de su país, y en 2011 fue galardonada con el Premio L’Oreal-UNESCO por su continua investigación sobre la química de las nebulosas.
* Esta bacana es parte de nuestro libro Mujeres Bacanas Latinas.