Reconocida como una de las “25 Mujeres en la Ciencia Latinoamérica” por la empresa 3M, la bióloga chilena Andrea Barrera es experta en Microbiología e Ingeniería Genética. Distinguida por su contribución a la divulgación de las ciencias, ha estudiado el crecimiento de organismos en entornos extremos y la posibilidad de crecimiento exoplanetario. Actualmente trabaja en un libro de cuentos para niños con la historia de grandes científicos y científicas.
Aprendió de genética leyendo sobre el naturalista Gregor Johann Mendel, descubriendo “su maravillosa sencillez experimental y la perfección para trascender,” fue la señal que recibió para saber que quería ser bióloga, dijo Barrera en una entrevista. Mujeres como Marie Curie y Rosalind Franklin fueron sus referentas que la motivaron a seguir y ocupar su espacio en un mundo dominado por hombres.
Oriunda de Talca, se mudó a la Región del Biobío para cursar la Licenciatura en Ciencias Mención Biología Marina en la Universidad de Concepción. Ganó una beca de doctorado, pero producto de un embarazo complicado pausó su sueño por alrededor de tres años. Decidida a retomar sus aspiraciones académicas, hizo un doctorado en Ciencias Mención Ingeniería Genética Vegetal en la Universidad de Talca. Más tarde se convirtió en académica en la misma casa de estudios.
En los últimos años se ha dedicado a investigar las Biocrust, costras biológicas de suelo claves para lograr el crecimiento de plantas en los lugares menos habitables. Asimismo, ha indagado en la posibilidad de que esta asociación permita el crecimiento en condiciones exoplanetarias, “bajo simulaciones de condiciones marcianas, por ejemplo. Los resultados han sido prometedores. La importancia está en que si logramos hacer crecer cultivos en condiciones extremas, podríamos enfrentar de mejor manera el cambio climático”.