El domingo Chloé Zhao se transformó en la segunda directora mujer, y en la primera asiática, en ganar un Globo de Oro por su trabajo en Nomadland. La cinta además ganó mejor película dramática.
Nació en Pekín, hija de Yuji Zhao, magnate de la industria del acero casado en segundas nupcias con la actriz china Song DanDan. De niña, ha contado, estaba obsesionada con el manga y creaba sus propias fan fiction. Cuando era adolescente la enviaron a estudiar a un internado en Inglaterra y luego se trasladó a Los Ángeles, Estados Unidos a terminar la secundaria. Estudió ciencias políticas en Mount Holyoke College, Massachusetts, y posteriormente cine en la Escuela de Artes Tisch (Universidad de Nueva York)
Zhao debutó en la pantalla con la película Songs My Brothers Taught Me que se estrenó en 2015 en Sundance. Dos años después la directora fue premiada en el Festival Internacional de Cine de Cannes por su película The Rider. Y en 2020 obtuvo un León de Oro en Venecia y el premio del público de Toronto, por Nomadland.
La cineasta conoció a Frances McDormand -protagonista de Nomadland- en un festival y luego la actriz la llamó para proponerle que dirigiera una película basada en el libro de Jessica Bruder, que lleva el mismo nombre, y cuyos derechos había adquirido. Zhao entonces se encontraba en plena promoción de The Rider, un western contemporáneo que ya había hecho que la industria reparara en ella.
En siete años y con tres películas estrenadas, la crítica ha destacado la delicadeza y sensibilidad de su trabajo. Ahora la directora dará un giro y pasa del indie al mainstream: a finales de este año estrenará Los eternos, gran producción de Marvel donde actúan Angelina Jolie y Salma Hayek, entre otras grandes estrellas, y que por primera vez mostrará a una pareja gay de superhéroes. Tras ganar el galardón, Zhao señaló que no quiere ser conocida sólo por el dato de ser la segunda mujer ganadora de los Globos de Oro -la primera fue Barbra Streisand por Yentl (1984)- sino por el mensaje político y social de sus películas.