La saxofonista Melissa Aldana se ha convertido en una artista única en la escena nacional e internacional de jazz. Descendiente del tenor Marcos Aldana, su padre y principal maestro, esta chilena debutó en los escenarios cuando tenía 9 años con su Selmer Mark VI, un saxofón tenor, junto a un cuarteto amigos de su padre. Claudia siguió progresando en su conocimiento y técnica del saxofón, dejando muy impresionados a jazzistas mayores como Phil Woods, Michael Brecker y Bob Mintzer.
Luego de participar con diferentes conjuntos de jazz nacional, Melissa se fue a estudiar a Estados Unidos en 2007 en la prestigiosa Berklee College of Music en Boston, donde comenzó a codearse y tocar con consagrados del jazz como George Garzone, George Coleman y Francisco Mela, entre otros. Se fue a vivir a Nueva York donde lanzó el primero de 4 discos, Free Fall en 2010, en el sello del saxofonista Greg Osby, Inner Circle Music. Además comenzó a tocar en diferentes lugares neoyorkinos como el Blue Note Jazz Club y a la vez comenzó a viajar y presentarse en varias partes del mundo, donde tocó con distintos músicos, con quienes Melissa comenzó a experimentar con sonidos nuevos que iba fusionando con su saxofón.
En 2012 editó su segundo trabajo, Second cycle, un trabajo dinámico donde innovó al no tener piano. Ese mismo año formó su conjunto Melissa Aldana & Crash Trio, con el baterista cubano Francisco Mela y el bajista chileno Pablo Menares.
Fue en 2013 que vino su consagración definitiva en la escena jazzística estadounidense y luego internacional, cuando ganó el prestigioso Concurso Internacional Thelonius Monk, siendo la primera sudamericana e instrumentista mujer en ganar dicho evento, lo que le valió un premio de 25 mil dólares y un contrato con Concord Jazz, el sello de Stan Getz y Ray Charles. Junto a su conjunto grabaron un disco homónimo que tuvo gran notoriedad, donde Melissa continuó desarrollando un sonido sin piano.
Ha realizado conciertos en todas partes del mundo, incluido el Festival de Jazz de Providencia, y críticos se rinden ante su sonido, dándole el adjetivo de ser la promesa del saxofón tenor y sin duda una de las instrumentistas más importantes de Chile.