Kathy Flores fue una jugadora y entrenadora de rugby estadounidense, una defensora de ese deporte para el mundo femenino, quien trabajó para su desarrollo y expansión.
De ascendencia filipina y hawaiana, Kathy nació en la costa este de los Estados Unidos y desde pequeña el deporte fue una parte esencial de su vida; practicó atletismo, hockey sobre césped y baloncesto. A finales de la década del 70 se licenció en Educación física, y más tarde ingresó a la Universidad Estatal de Florida para una maestría en Fisiología del ejercicio. Fue ahí donde se adentró en el rugby a través del equipo universitario: ocupó la posición número 8, y comenzaría a ser reconocida por su fuerza, tecnicismo y estrategia al jugar.
Fue el inicio de una trayectoria de más de cuarenta años, en la que se convirtió en jugadora de la selección nacional de rugby de Estados Unidos, equipo del que fue capitana y con el que ganó en 1991 la primera Copa Mundial de rugby femenino frente a Inglaterra. Más tarde, entre los años 2003 y 2010 sería entrenadora de la selección, convirtiéndose en la primera mujer en liderar este equipo. Bajo su dirección, el país logró obtener en dos oportunidades más la copa mundial, durante la edición de 2006 y 2010.
Además Flores fue entrenadora de equipos universitarios y semiprofesionales en los que destacan Berkeley All Blues, el equipo femenino de rugby de la Universidad de Brown y el San Francisco Fog, equipo de hombres homosexuales.
La inclusión y lucha contra las barreras de género fue lo que destacó en la carrera de Kathy, sobre todo en una disciplina en la que los equipos femeninos muchas veces se debían valer por sí mismo frente a un subfinanciamiento y menor soporte en comparación a los equipos masculinos. Por su trayectoria fue parte del Salón de la Fama de Rugby de Estados Unidos en dos oportunidades: durante la copa del mundo del 90 junto a su equipo y luego de forma personal en el año 2016. A los 66 años Flores murió a causa de cáncer durante el 2021.