La mexicana Lola Cueto fue una artista que se desempeñó en distintas áreas artísticas como la escritura, dramaturgia, pintura, grabado, tapices bordados, papel picado, laca y diseño y manejo de marionetas. Fue una precursora del reconocimiento al talento femenino en una época donde los hombres lideraban la escena artística.
María Dolores Velázquez Rivas nació en Ciudad de México el 2 de marzo de 1897, fue criada por su madre y su tercer esposo en la colonia Villa de Azcapotzalco. A los 12 años fue una de las primeras mujeres en ser admitida en la Academia de San Carlos, donde comenzó sus estudios del arte. Se inscribió en varias escuelas para desarrollar su talento y a los 16 años inició su carrera artística como profesora de dibujo en la Escuela Nocturna para Obreros.
Se casó en 1919 con el escultor Germán Cueto, adoptando su apellido. Luego del nacimiento de sus dos hijas, Ana María y Mireya, ambos artistas decidieron mudarse a París, donde Lola tuvo su primer acercamiento al arte de las marionetas. Con una alta influencia del arte mexicano y su ideología sobre educación, fundó tres compañías de teatro guiñol, siendo la más importante, El Nahual; con la que presentó la obra ‘‘El Renacuajo Paseador’’ en el palacio de Bellas Artes, en 1940.
Regresó a México junto a su familia en 1923 y ejerció como profesora de grabado, dibujo, dramaturgia, tapices y otras ramas del arte, en distintas instituciones, por largo tiempo. En 1933 fue miembro fundadora de la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios (LEAR) y se le otorgó el cargo de animadora en el Teatro Escolar del Departamento de Bellas Artes.
Se divorció 1940 y se internó en la enseñanza de artes espirituales y místicas en la Orden Rosacruz, institución de la que fue parte hasta el día de su muerte. En 1957, el Instituto Nacional de Bellas Artes, reconoció sus 25 años de trayectoria como artista y educadora.
A los 82 años, debido a su avanzada diabetes y una enfermedad metabólica, Lola muere en su hogar en la población San Jerónimo en México.