Una triunfadora indiscutida de estos Juegos Olímpicos es la estadounidense Allyson Felix. Con seis medallas de oro se convirtió en la deportista con más medallas olímpicas del atletismo, superando el récord de Carl Lewis. Y además demostró que la maternidad y el deporte de alto rendimiento sí pueden ser compatibles, aunque su camino fue difícil.
Felix es especialista en velocidad, sobre todo en 200 metros, prueba en la que se proclamó subcampeona olímpica en Atenas 2004 y Pekín 2008, campeona olímpica en Londres 2012 y campeona mundial en 2005, 2007 y 2009. Su historia además develó algunas de las discriminaciones que sufren las atletas mujeres. ‘My Own Nike Pregnancy Story’ se tituló la carta que la atleta mandó al New York Times para que más gente conociese su historia: Nike quería rebajarle el 70% de su contrato por estar embarazada. “Las atletas tenemos demasiado miedo de decir públicamente que si tenemos hijos corremos el riesgo de que nuestros patrocinadores nos recorten el salario. Es un ejemplo de una industria deportiva donde las reglas están hechas mayoritariamente por hombres”, denunció entonces.
Meses después, la marca se comprometió a proteger a las deportistas embarazadas. Luego la californiana confesaría que cuando ya tenía dos meses de embarazo, prefirió ocultarlo al competir en la Diamond League. Felix consideró que debía mantener esa noticia en reserva y citó a Serena Williams que ganó el Open de Australia de 2017 estando embarazada.
En noviembre de 2018 tuvo a su hija Camryn, luego de que su embarazo se complicara y fuera sometida a una cesárea prematura. Rápidamente retomó su entrenamiento para llegar preparada a Tokio. La californiana de 35 años participó por quinta vez en unos Juegos Olímpicos -su debut fue en Atenas el año 2004- y a través de su Instagram le dedicó esta competición a su hija: “Cuando me veas en la pista, espero que entiendas mi lucha. Como atleta a la que le dijeron que era demasiado mayor, como mujer a la que le dijeron que conociera mi lugar, como madre que no estaba segura de que viviría para criar a mi hija. Espero que lo veas, se trata de mucho más de lo que dice el reloj.”