Un año de mascarillas, distancias sociales, alcohol gel. Un año de “nueva normalidad”.
Para las mujeres, además, fue un año de retrocesos.
El encierro hizo que las consultas telefónicas por violencia intrafamiliar en Chile aumentaran un 70 por ciento en los primeros meses de cuarentenas totales, según el Ministerio de la Mujer.
De las personas que perdieron su trabajo en Chile en 2020, un 48,9 por ciento eran mujeres. De ellas, el 88 por ciento se salió de la fuerza laboral; no estaban buscando un nuevo trabajo, según datos entregados por una encuesta de Comunidad Mujer.
Porque hay niños que cuidar, porque hay abuelos que cuidar, porque hay que cuidarse a una misma, y hacer todo lo que se hacía antes, y multiplicarlo: otras encuestas mostraron que en el encierro, eran las mujeres las que se hicieron cargo del colegio a distancia, de la limpieza y el orden, además de sus trabajos. O lo hicieron en porcentajes muchos mayores que los hombres.
Las cifras se repiten a lo largo de América Latina, Europa y Estados Unidos: las mujeres están dejando la fuerza laboral porque esta pandemia las terminó por expulsar del sistema. El último informe publicado al respecto por la Unión Europa, sentencia: “La pandemia de COVID-19 ha afectado desproporcionadamente las vidas de las mujeres. Hay amplia evidencia que los avances alcanzados en los últimos años se han retrocedido; el progreso en los Derechos de las Mujeres es difícilmente ganado, pero fácilmente perdido”.
A pesar de todo lo anterior, las mujeres dieron un paso al frente: En Chile vimos multiplicarse las ollas comunes en cada rincón donde había hambre, con manos femeninas capaces y querendonas, haciendo comida rica para todos los que trajeran su plato. En nuestro país la mayoría de quienes son profesionales de la salud -sobre todo Enfermeras y TENS- son mujeres- y han estado en primera línea sin descanso. Las apoderadas que día a día se sentaron frente al computador o la guía escolar, para explicarle a los niños la materia del colegio. Todas, en todo el mundo, aportando.
Mujeres, en este 8M, desde Mujeres Bacanas queremos decirles: las vemos, las admiramos y juntas volveremos a avanzar.
(Créditos fotos: time.com, nymag.com, Doctora Patricia Ruz Espejo delHospital Salvador, @elhambrenoespera2020)