Poeta y escritora nicaragüense, Gioconda Belli destaca por su pluma feminista, erótica y revolucionaria; reconocida con numerosos premios internacionales. Militó durante 24 años en el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
Nació y se crió en una familia adinerada. Su padre, Humberto Belli, fue empresario, y su madre, Gloria Pereira, fundadora del Teatro Experimental de Managua. Estudió la secundaria en España, se graduó de publicidad y periodismo en Estados Unidos y regresó a Nicaragua.
En 1970 publicó sus primeros poemas e ingresó a las filas del FSLN, movimiento que buscaba derrocar la dictadura de Somoza. Dos años después obtuvo el Premio de Poesía “Mariano Fiallos Gil”, el más prestigioso de su país, por su poemario Sobre la grama. Durante su militancia fue mensajera clandestina, transportó armas, viajó por el mundo obteniendo recursos y divulgando la lucha sandinista; y fue miembro de la Comisión Político-Diplomática. Se exilió en México y Costa Rica.
Tras la caída del dictador retornó y empezó a resaltar en el mundo de las letras. En 1978 ganó el Premio Casa de las Américas -Cuba- en el género poesía por su libro Línea de Fuego y paralelamente trabajó en el nuevo gobierno sandinista. En 1994 dejó de pertenecer al FSLN por su descontento con el rumbo que tomó el partido.
Publicó su primera novela en 1998, La Mujer Habitada, sobre una mujer que vuelve a su país y encuentra tanto el amor como la lucha por la libertad. Ganó con esta novela el Premio Anna Seghers de la Academia de las Artes de Alemania. En 2018 el Centro PEN Club International le otorgó el galardón alemán Hermann Kesten por su compromiso con los derechos de la mujer y la justicia social. Un año más tarde fue distinguida con el premio Oxfam-Novib PEN Internacional por la libertad de expresión.
Sus obras han sido traducidas a más de 20 idiomas. Es presidenta de PEN Internacional Nicaragua, miembro de la Academia Nicaragüense de la Lengua y Caballero de las Artes y las Letras de Francia.