Premio Nacional de Periodismo y reconocida con el galardón Maria Moors Cabot -máxima distinción entregada en EE.UU. a una periodista extranjera-, Patricia Verdugo fue una minuciosa investigadora periodística. Conocida por su lucha contra la violación a los derechos humanos, su trabajo permitió a la sociedad chilena enterarse de lo ocurrido en dictadura.
A los 21 años, recién titulada de Periodismo de la Universidad Católica, entró como ayudante de Relaciones Públicas en la Escuela Militar. El hermano de Sergio, su padre, era coronel del Ejército y fue quien le ayudó a conseguir el puesto.
En 1971 sufrió la primera de sus más grandes penas. Siendo una madre de 24 años vio morir a su primogénito a causa de una malformación renal. Y un par de años más tarde otro ataúd blanco se llevaría a su hija Ángela. El dolor fue un motor en la carrera de Patricia.
El 73 ocurrió el golpe de estado en Chile. A los pocos meses Patricia renunció a su trabajo para dedicarse de lleno a Ercilla, publicación quincenal dedicada a diversos temas. En 1976 su padre Sergio Verdugo, presidente del Sindicato de la Sociedad Constructora Establecimientos Educacionales, fue asesinado por la Dirección de Inteligencia de Carabineros DICAR. Las presiones de la dictadura y la autocensura de Ercilla hicieron que renunciara a la revista en 1977 junto al equipo completo. Fue así que formaron la revista Hoy, con una posición crítica al gobierno de Pinochet y de denuncia a lo que estaba ocurriendo en Chile.
Patricia Verdugo fue una fiel disidente de la dictadura y aprendió a comunicar en medio de la censura. Los libros que escribió fueron decisivos para informar a los chilenos. En 1979 publicó “Una herida abierta”, el primero de nueve títulos en total, incluyendo “André de la victoria” y “Quemados vivos”. En 1983 asumió como presidenta regional del Colegio de Periodistas y en 1989 publica su trabajo más famoso, “Los zarpazos del Puma”, sobre la caravana de la muerte, el que se convirtió en un éxito de ventas. Retornada la democracia al país, siguió trabajando e investigando, hasta su muerte en 2008 debido a un cáncer fulminante.