Patricia Chavarría es una folclorista chilena e investigadora de la cultura tradicional y campesina. Por 50 años se ha dedicado a recopilar y mantener viva la música popular a través de sus investigaciones por diversas regiones del centro sur de Chile.
Nació en Concepción. Desde pequeña tuvo gran interés por la música chilena gracias a las melodías que estaban presente en su casa y en su entorno familiar. Durante su adolescencia comenzó a tocar guitarra y participar en diversos grupos de folclore, convirtiéndose en alumna de Gabriela Pizarro, destacada compositora y folclorista chilena. En 1964, a sus 18 años, inició su acercamiento al campo, donde a través de la convivencia con diversas comunidades rurales se involucró y conoció la cultura campesina, sus manifestaciones, la manera en que veían el mundo y la forma en la que se desarrollaba la figura femenina en la música popular.
Sus investigaciones se iniciaron en Penco, donde comenzó a recopilar las vivencias y el trabajo de cantoras chilenas. Se empapó en las historias y en la cultura tradicional a través de su trabajo en terreno, donde no sólo conoció de melodías y cánticos sino que costumbres, oficios y ritos de la vida campesina. Logró recoger la esencia popular y difundirla a través de libros, discos, artículos y recolección sonora, la que es parte del Archivo de Literatura Oral y Tradiciones Populares de la Biblioteca Nacional, donde se encuentran tanto piezas musicales como poesía popular y material audiovisual de relatos y festividades campesinas. Además el material recopilado de la investigadora está en el Archivo de Cultura Tradicional en la Corporación de Artista de Acero, en Concepción.
Patricia ha sido directora artística de talleres folclóricos, como el “Millantú”, y fue asesora de programas culturales de televisión. Por su trabajo fue reconocida con el Premio Nacional de Folclor en 1985, la Medalla al Mérito, en la mención de investigación, en 2002 por el Consejo Chileno de la Música, la medalla Bicentenario en 2010, el Premio a la cueca “Samuel Claro Valdés” (2001) y el Premio Margot Loyola en categoría investigación en 2016.