Alice Milliat fue una deportista de remo, nadadora y jugadora de hockey. Es reconocida por luchar por la inclusión de la mujer en los deportes, convirtiéndose en la impulsora de la competencia femenina de atletismo en los Juegos Olímpicos.
Nació en Francia en una familia de clase media. Se formó como maestra y a los 20 años se casó con Joseph Milliat. El matrimonio se mudó a Londres, lugar donde Alice comenzaría a practicar remo y donde enviudaría cuatro años después. Nunca se volvió a casar y gracias a su manejo de idiomas pudo viajar por distintos países trabajando como traductora. Tras eso, y por su gran pasión al deporte, fue parte de Femina Sport y en 1917 fue una de las fundadoras de la Federación Francesa de Deportes Femeninos.
Comenzó a impulsar medidas por la inclusión del atletismo femenino en los Juegos Olímpicos, ya que la convocatoria solo consideraba a las mujeres en las competencias de Golf y Tenis. La iniciativa la propuso ante el Comité Olímpico Internacional (COI) y a la Federación Internacional de Atletismo Amateur (IAAF) quienes rechazaron la idea. En 1921, tras la falta de apoyo de esas organizaciones, creó la Federación Internacional Deportiva Femenina, con la que impulsó los Juegos Mundiales Femeninos, encuentro deportivo que se replicó cada cuatro años entre 1922 a 1934.
Tras el éxito del segundo encuentro de este mundial realizado en Suecia, el COI y la IAAF decidieron integrar a través de cinco pruebas el atletismo femenino en los Juegos Olímpicos de 1928 en Ámsterdam. Al ser una medida que no respondía en su totalidad a lo que Alice estaba pidiendo, los mundiales organizados por la Federación Internacional Deportiva Femenina continuaron con dos convocatorias más en el años 1930 y 1934.
El trabajo de esta organización llegó a su fin en 1938 cuando las entidades olímpicas comenzaron a dar un mayor espacio para las mujeres, logrando que el atletismo femenino formara parte de la IAAF.