La inmunóloga alemana Özlem Türeci es la co-fundadora, junto a su marido Ugur Sahin, de la empresa BioNTech; creada en 2008, se especializa en investigación de tratamientos para el cáncer. En 2020 crearon una vacuna para el Covid-19, en alianza con Pfizer, que es la primera en comenzar el combate mundial contra la enfermedad, con más de un 90 por ciento de efectividad.
Özlem Türeci nació y creció en la pequeña ciudad de Lastrup, Alemania; su padre, un inmigrante turco, era el doctor de la localidad. Türeci creció viéndolo trabajar y de adulta decidió seguir también el camino de la medicina. Estudió y se doctoró en Saarland, y luego se convirtió en referentes del tratamiento inmunológico contra el cáncer.
En 2002, cuando terminaba de estudiar, conoció a Ugur Sahin, quien ya trabajaba como médico en el Hospital de la Universidad de Saarland; el día que se casaron volvieron los dos al laboratorio después de la ceremonia.
Türeci y Sahin, quienes tienen una hija, fundaron la empresa farmacéutica Ganymed, la que desarrolló tratamientos de inmunología para el cáncer de esófago y gástrico. Era Türeci la directora de la empresa entre 2008 y 2016, cuando la vendieron por $1.4 mil millones de dólares.
Convertidos en multimillonarios, Türeci y Sahin siguieron con su vida dedicada a la ciencia -además de vivir en el mismo departamento en Alemania, e irse al trabajo en bicicleta-. Crearon en 2008 BioNTech, de la que Sahin es el CEO y Türeci la Jefa de Medicina. La empresa se especializa en la creación de tratamientos contra el cáncer que en vez de hacer quimioterapias, crea tratamientos específicos para cada tumor y persona, usando su propio sistema inmune.
En 2020, al ver que la enfermedad nacida en Wuhan llamada Covid-19 podía expandirse, Sahin comenzó a trabajar con su equipo en una vacuna, usando la tecnología de BioNTech. Para proyectarse con vacunas para el mundo, se aliaron con la gigante farmacéutica Pfizer. Así nació la vacuna que con gran efectividad ya está siendo administrada, a solo un año del inicio de la pandemia. Türeci y Sahin se han convertido en héroes de la era Covid-19; podrían no sólo ganar un Nobel de Medicina, sino que de la Paz, salvando vidas una vacuna a la vez.