Lily Renée fue una artista estadounidense-austriaca reconocida como una de las mujeres pioneras en el mundo de las historietas y el dibujo de comics.
Lily nació en Viena en una familia de origen judía. Desde pequeña el dibujo estuvo presente en su vida, lo que quedó interrumpido tras la Segunda Guerra Mundial. Con la llegada de los nazi a Austria, la joven se separó de su familia y huyó a Inglaterra, donde comenzó a trabajar como asesora de hogar y cuidadora. Más tarde logró retomar contacto con sus padres y reunirse con ellos en Nueva York.
En medio de la búsqueda de nuevos empleos, Lily se postuló como caricaturista en la editorial Fiction House, donde se reencontró con el dibujo. La artista ingresó a un mundo masculinizado y sexista, abriéndose camino en un ambiente hostil. En sus inicios sus labores sólo la contemplaron para la limpieza del material de otros artistas, sin imaginar que se convertiría en la dibujante que dio vida a personajes de acción femeninos que empoderaron el rol de las mujeres dentro del gran mundo de los comics.
Según The New York Times, la artista aportó a las historietas un sello de realismo mágico y un nuevo uso de las tradicionales cuadrículas de dibujo. Dentro de sus mayores trabajos están las aventuras de “Jane Martin” y la “Señorita Río”, mujeres protagonistas que fueron ilustradas en el periodo de guerra como pilotos u espías que se enfrentaban a los nazis. Con estos trabajos Lily se convirtió en una de las pocas dibujantes mujeres de la época que ilustró portadas.
Tras dejar Fiction House, Lily continuó dibujando historietas de humor y romance, pero su paso por el mundo de los cómics acabó pronto. Más tarde ilustró libros para niños, escribió obras de teatro y trabajó en el diseño textil. Pese a que su carrera no fue reconocida en su momento, en 2011 la dibujante e historiadora, Trina Robbins, publicó ‘Lily Renée: Escape Artist’ la autobiografía en formato novela gráfica de la artista, obra con la que plasmó su historia.