Lidia Gueiler fue la primera Presidenta Interina de la República de Bolivia. Militante del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), diplomática y parlamentaria, gobernó menos de un año debido a un golpe de estado en su contra. Fue la segunda mujer en estar al mando de un país latinoamericano.
Su padre Moisés Gueiler, alemán, falleció cuando Lidia tenía dos años y la economía familiar entró en crisis. Su madre Raquel Tejada, boliviana, se dedicó a tejer ropa y arrendar habitaciones para mantenerla. Lidia estudió en el Instituto Americano de Cochabamba, siendo una de las pocas mujeres de su generación que se tituló de contadora general.
A los 19 se casó con un ex prisionero de guerra paraguayo y emigraron a Asunción. Tras separarse regresó a La Paz y trabajó en el Banco Central de Bolivia. En 1947, el personal llevó a cabo una huelga en defensa del derecho sindical. El conflicto generó el despido de varios funcionarios, entre ellos Lidia. Este hecho motivó su lucha por la reivindicación social.
En 1948 empezó a militar en el MNR y en 1951, junto a 27 mujeres, inició una huelga de hambre pidiendo la liberación de los presos políticos entre otras demandas. Al año siguiente participó en la Revolución Boliviana que logró el sufragio universal y el ascenso a la presidencia de Paz Estenssoro.
Ejerció como diplomática en Alemania. Fue electa diputada en dos períodos y presidenta de la Cámara de Diputados. Se unió al Partido Revolucionario de la Izquierda Nacionalista, se desempeñó como vicepresidenta del Frente Revolucionario de Izquierda y en 1979 retornó al MNR. El mismo año, luego de una cruenta dictadura militar, el Congreso la nombró Presidenta Constitucional Interina de la República.
En 1980 es derrocada tras un golpe de estado y obligada a firmar su renuncia a la presidencia. Se exilió en Perú y luego en Francia durante más de dos años. Con el retorno a la democracia se convirtió en embajadora en Colombia, Senadora de la República por Cochabamba, dirigenta de organizaciones feministas y representante ante la Comisión Interamericana de Mujeres.