La doctora estadounidense Gladys MacGarey no fue solo una médica pionera, sino que también es conocida como “madre de la medicina holística”. Con más de cien años, sigue compartiendo sus aprendizajes de cómo vivir una vida de manera más plena y feliz.
MacGarey nació en India, donde sus padres doctores y misioneros atendían en diferentes localidades. Siendo una adolescente llegó a Estados Unidos y más tarde quiso ser ella también profesional de la salud, “cuando a las mujeres no se les permitía ni tener cuenta de banco”. Hizo su práctica de interna en el Deaconess Hospital, donde era la única mujer y los superiores la discriminaban. Gladys no se rindió y comenzó a atender como médica familiar y general.
Se casó con Bill MacGarey, también doctor, y tuvieron seis hijos. Fue atendiendo pacientes que Gladys consideró el enfoque de los médicos no era el correcto: sólo recetar medicamentos, sin tomar en cuenta calidad de vida, alimentación, prevención de la enfermedad y más. En 1978 Bill y Gladys se unieron a otros médicos para crear la Asociación Americana de Medicina Holística. Gladys lo ve como complemento: los conocimientos científicos junto a un cuidado que mira al paciente completo, incluyendo espíritu, mente y emociones para poder sanar.
Gladys comenzó a centrarse en trabajar con partos naturales, viajando a diferentes partes del mundo para hacerlos más seguros para las madres. También fue activa en incluir a la acupuntura en el mundo de la medicina occidental.
Cuando tenía 70 años, Bill le presentó los papeles de divorcio, se había enamorado de otra colega. El mundo de Gladys se derrumbó: perdía a su marido y también a su socio. Armó su propia clínica junto a su hija, y después de un luto largo y difícil, decidió que no podía seguir sufriendo. Tenía más de 90 años y decidió aprovechar al máximo las posibilidades de su independencia tardía.
En 2023, con más de cien años, escribió un nuevo libro, Una vida bien vivida, para ayudar con la longevidad, y saber dejar ir los sufrimientos innecesarios.