La primera arquitecta de Pakistán, Yasmeen Lari, tras estar dedicada por 40 años a construir grandes edificios corporativos para las elites mundiales, hoy es un emblema de la arquitectura puesta al servicio de la comunidad y de los más desposeídos.
Al regresar a su país natal, luego de haberse graduado en 1964 de Arquitectura en Oxford Polytechnic, abrió su propia oficina. A pesar de los prejuicios que tuvo que enfrentar por ser mujer, Lari estuvo a cargo del diseño de varios edificios en Karachi, como el Centro Financiero (1989), el Hotel Taj Mahal (1981) y las oficinas centrales del Petróleo Estatal de Pakistán (1991), entre otros.
En el año 2000 decidió retirarse de la arquitectura comercial y enfocarse en el cruce de esta disciplina con la justicia social, mediante la Fundación Patrimonial en Pakistán (Heritage Foundation) creada en 1980 junto a su marido. Su finalidad fue construir con materiales básicos y entregar herramientas que guiarán a personas analfabetas de zonas vulnerables, para cocrear proyectos donde la comunidad es parte integral del proceso de diseño y construcción.
El 2005 un terremoto grado 7.6 en la escala de Richter azotó Paquistán, dejando 400 mil familias desplazadas. Yasmeen, quien hasta ese momento no tenía experiencia en arquitectura de desastre, comenzó un proyecto para capacitar y ayudar a familias a construir sus casas usando materiales de los escombros como barro, cal, piedra y madera.
En la última década, se ha dedicado a ayudar en poblaciones víctimas de desastres, diseñando infraestructura modular para comunidades que funcionan en inundaciones; refugios hechos de bambú con técnicas locales; y un artefacto para cocinar, denominado chulah, de producción local por una cadena de artesanas que desde 2014 han hecho 60,000 unidades, lo que ha ayudado a 400.000 personas a mejorar su salud gracias a la disminución de la contaminación en la cocina.
Su trabajo de arquitectura social ha recibido numerosos reconocimientos, como el Sitara-e-Imtiaz que es el más alto honor de parte del gobierno pakistaní, que destacó su labor en la reconstrucción y protección del patrimonio. Y este 2020, con 79 años, Yasmeen recibió el Premio Jane Drew que destaca a mujeres en la arquitectura.