Mehranguiz Manoutchehrian fue la primera abogada y senadora de Irán; se desempeñó durante el régimen de Mohammad Reza Pahlevi, último Sha de Irán. Miembro de la Organización de Mujeres en su país, participó en la redacción de la Ley de Protección de la Familia para ampliar los derechos de la mujer.
Como senadora propuso la ley sobre el matrimonio que apuntaba a eliminar la obligación para las mujeres casadas de obtener la autorización de su marido para salir del país, la posibilidad de divorciarse, la custodia de los hijos, entre otros. Por esto fue duramente criticada.
Algunos miembros del clero afirmaron que la Ley no era compatible con el Islam y amenazaron con denunciarla públicamente como hereje. Temiendo por su seguridad, se fue de Teherán por un tiempo.
Al regresar tuvo una discusión con el primer ministro Jafar Sharif-Emami donde éste la menoscabó públicamente. Pese a que luego la visitó en su casa para pedirle disculpas, ella pidió que hiciera esto ante todos y él se negó. Después del conflicto la instaron a renunciar a su escaño en el Parlamento.
Por su labor en la promoción de los derechos de la mujer recibió el Premio de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en 1968. Presidenta de la Federación Internacional de Abogadas, se encargó de que se tradujera al persa la Declaración Universal de Derechos Humanos para distribuirla en su país.
Tras menos de un mes de la revolución iraní de 1979, la ley por la que tanto luchó fue derogada bajo el pretexto de ser antiislámica. Pese a que habían prometido la igualdad entre hombres y mujeres, que estas serían libres de tomar sus propias decisiones, no ocurrió así sino que todo lo contrario. Hasta la actualidad las mujeres iraníes luchan por recuperar sus derechos.