Es una de las modelos más llamativas del momento: con 22 años, acaba de convertirse en el rostro de una nueva línea de zapatillas Nike, las Air vapormax. Se suma a las campañas que ha hecho para marcas como Desigual, Diesel y joyas Swarovski, además de apariciones en revistas como Glamour, Cosmopolitan y Vogue. Winnie Harlow llama inmediatamente la atención, ya que ha hecho de una condición física, una potente característica diferenciadora: tiene vitiligo, la enfermedad que afecta la pigmentación de la piel, creando zonas decoloradas en su color negro.
Su nombre real es Chantelle Brown-Young, y es oriunda de Toronto, Canadá. A los cuatro años se le diagnosticó el vitiligo, que causa las despigmentaciones y es crónico. Por supuesto que cuando pequeña era un problema, ya que los niños solían molestarla y ponerle apodos como “zebra”. Eventualmente, dejó el colegio, cansada del acoso y sin muchas ganas de seguir estudiando.
Pero eventualmente Winnie Harlow convertiría al vitiligo en su mayor plusvalía. Entró al concurso televisivo America’s Next Top Model, donde Tyra Banks es la anfitriona. Aunque no ganó, definitivamente llamó la atención, y comenzó lo que hoy es una lucrativa carrera de modelo. Se ha convertido en la musa de famosos fotógrafos, y contra todo lo establecido como lo “normal” en el mundo de la belleza, que tiene a homogenizar a sus modelos, es un rostro de campañas.
Además, Harlow hace vocería por la autoestima, el aceptar las diferencias y valorar los cuerpos: desde una charla TED -donde concluyó que “hay belleza en todas las cosas”-, hasta participar en las charlas organizadas por la marca Dove sobre autoestima, ha sido elegida como mujer destacada por la BBC, y más.