Deirdre McCloskey nació como Donald McCloskey en 1942. Cuando niño le gustaba vestirse de mujer, ponerse las pantys de su mamá y jugar a ser otra persona. Donald salió con mujeres y se casó a la edad de 22 años, con una mujer que tomó su afición por el vestuario femenino como una excentricidad privada.
Antes de dar el paso de transformarse en Deirdre, Donald estudió Economía, de la cual se doctoró en 1970 de la Universidad de Harvard. Desde los sesenta comenzó a interesarse en sus investigaciones en la retórica de la persuasión en la economía, la teoría literaria y la teoría social. Principalmente criticó la metodología oficial y modernista heredada del positivismo lógico de 1940, a la que calificó de ignorante en su tratamiento en cómo debe progresar la economía. Un problema al que recomendó acercarse con la retórica, mediante conversaciones disciplinadas donde el lenguaje y la persuasión son centrales en el desarrollo de la economía.
Con 53 años, siendo profesor en la Universidad de Illinois en Chicago, cambió de sexo en 1995. Pensó que perdería su carrera académica. Pero no fue así, y en 1999 publicó Crossing, sus memorias de transición a mujer y las pequeñas victorias de sentirse en el cuerpo adecuado, cuando por ejemplo le decían señora en un restorán.
Desde mediados de los noventa su trabajo académico la ha hecho doctora honoris causa de seis universidades y profesora de economía, historia, inglés y comunicaciones de la Universidad de Illinois en Chicago; y profesora de economía, filosofía y estudios artísticos y culturales en la Universidad Erasmus de Rotterdam entre 2002 y 2006.
La causa de su éxito es la gran variedad de temas con los que aborda la economía, donde ha contribuido en alrededor de 360 artículos sobre temas como la cuantificación de la investigación histórica, la retórica de la economía, la retórica en las ciencias humanas, la metodología en economía, axiología, economía feminista, economía heterodoxa, el papel de las matemáticas en el análisis económico y el buen (y mal) uso de las pruebas de significancia en economía. Acuñó el término Humanomics, o sea la economía de lo humano.
Entre los 17 libros que ha escrito, destaca su serie “La Era Burguesa”, una trilogía compuesta por Las virtudes burguesas (2006), Dignidad burguesa” (2010) e Igualdad burguesa (2016)”. En estos aborda un estudio sobre los orígenes de las economías modernas en base a la revaloración de la burguesía y sus virtudes, es decir con un fundamento en la vida ética. Así por ejemplo plantea la prudencia como virtud central en la teoría de la economía actual y que la forma más eficiente para superar la pobreza es mediante el liberalismo pues es el sistema que a su juicio es el más moral.