Jeanne Villepreux-Power fue una naturalista francesa, reconocida por ser una pionera de la biología marina, y también la creadora de los acuarios.
Nacida en plena Revolución Francesa, Jeanne fue autodidacta. Al igual que muchas mujeres de la época, por sí sola aprendió a leer y escribir y, a los 18 años, emprendió a través de la confección de prendas.
Tras casarse se mudó a Sicilia, zona que le permitió estudiar a mayor profundidad la naturaleza y fauna oceánica. Nuevamente de forma autodidacta, recorrió la isla para realizar sus investigaciones, las que se centraron en el desarrollo de los moluscos y la formación de su concha. Fue así como se las ingenió para crear mecanismos que entregaran un mayor aporte para la observación de estos animales marinos y la forma en la que se desenvolvían en su ecosistema. En esta búsqueda dio vida a los acuarios, su principal contribución a la comunidad científica y por la que es reconocida hasta la actualidad.
Según la Fundación Aquae, la pionera en biología marina construyó tres tipos de acuarios: el conocido de vidrio, otro sumergible de este mismo material, pero cubierto por una rejilla, y por último uno con infraestructura más grande y con anclaje a distintas profundidades para estudiar diversos tamaños de moluscos. Además, Jeanne creó diversas publicaciones en torno a la vida submarina y la naturaleza de la isla, como el libro “Guida per la Sicilia” con el que hizo un repaso por la riqueza del lugar y en el que entrega especificaciones para su protección y conservación sostenible, siendo destacada por la promoción de la acuicultura en la zona.
Pese a que parte de sus materiales se perdieron en el mar cuando viajaba de París a Londres, sus pioneros trabajos marcaron grandes avances para la comunidad científica y la observación de la vida submarina e incluso llegó a convertirse en la primera mujer en ingresar a la Academia de Ciencias Naturales de Catania. Junto a eso, también fue miembro de la Sociedad Zoológica de Londres.