Emma González se ha transformado en la imagen más poderosa de la lucha contra las armas en los Estados Unidos. El sábado pasado, en las masivas manifestaciones #MarchForOurLives en Washington, la joven sobreviviente de la matanza Marjory Stoneman Douglas se subió el escenario con su ya emblemático look de cabeza rapada y chaqueta militar y guardó silencio durante seis minutos y 20 segundos. El mismo tiempo que demoró Nikolas Cruz, de 19 años, en matar a 14 estudiantes y 3 profesores con un fusil de asalto el pasado de 14 de febrero en Parkland, Florida.
“Tengo 18 años, soy cubana y bisexual”, ha dicho la hija de inmigrantes latinos que además se ha transformado en rostro de la comunidad LGBTI. Por esas mismas características ha tenido que soportar declaraciones como las del congresista republicano Steve King, quien publicó en facebook una foto de González burlándose de su vestimenta y procedencia: “Así te ves cuando presumes de tu herencia cubana pero no hablas español e ignoras el hecho de que tus antepasados huyeron de la isla cuando la dictadura convirtió a Cuba en un campo de prisioneros”.
“Emma para presidente”, escribió en Instagram la actriz estadounidense Amy Schumer y Hillary Clinton dedicó un tuit a destacar la valentía de la joven que ha increpado directamente al presidente Donald Trump y a todos los políticos que reciben financiamiento de la Asociación Nacional del Rifle. González además ha dicho que no regresará a la escuela Majory Stoneman Douglas hasta que se produzcan cambios sustantivos en la legislación sobre armas.