Si Teresa Paneque imagina su futuro, se ve siendo “un aporte en la creación de políticas públicas con mirada científica e inclusiva”. Astrónoma, feminista, comunicadora científica y escritora, tiene más de 48 mil seguidores en su Instagram y este año publicó su primer libro de ficción, sobre Carlota, una niña que pese a que no le gustan las ciencias, aprende de ellas con su profesora y amigas. Teresa es una de las Bacanas Sub 30 de 2020, elegida por Mujeres Bacanas y el Programa de la Autoestima de Dove.
Nació en España mientras su mamá, chilena, y su papá, cubano, terminaban sus doctorados en ciencias. Tuvo el “privilegio” de que ese era el estilo de vida en su casa: pasó su infancia en laboratorios. Cuando tenía cinco años la familia se trasladó a Escocia, y luego a los nueve se mudaron a Chile.
Cuando entró al colegio pensó que estaba en un juego, pero un día dejó de ser divertido. “Era como la época victoriana, así de arcaico. El sistema educativo no me hacía sentido. esto de las pruebas, uniforme, pizarra”, cuenta. La educación pública en el Reino Unido era incomparable con la chilena, la mentalidad era otra.
Desde siempre su mamá y papá la motivaron a que aprendiera distintas cosas. A Teresa le encantaba enseñar tanto como aprender. Hacía clases para sus muñecos, reforzamiento a sus compañeras. Desde sexto básico a cuarto medio participó de Pentauc, proyecto educacional enfocado en niñas y niños con talento académico.
Asistió a clases de robótica, física, matemáticas avanzadas. Lo más importante fue encontrar personas similares a ella. “Ya no tenía que suprimir lo que me hacía diferente, ya no me sentía rara. Podía hablar de libros, también se emocionaban con las matemáticas”.
Fue parte de FIRST LEGO League, programa de la Fundación SparkTalents que fomenta las vocaciones científicas y tecnológicas en los jóvenes. Aprendió a armar y programar robots de lego, concursó en competencias escolares. Al entrar a la universidad se inscribió como voluntaria para aportar con su tiempo y conocimiento.
Decidió que el universo era entretenido. Le gustó la idea de predecir el comportamiento de la naturaleza, quería entenderlo. A diferencia de la mayoría de los astrónomos del país, no quiso ir a ver el eclipse solar en el norte de Chile. Como era de las pocas científicas que se había quedado en la ciudad, la llamaron a ella para que fuera a la televisión a hablar sobre el tema. Asistió a Radio Cooperativa como invitada, luego se convirtió en panelista del programa “Miércoles astronómicos”. Justo el día que la luna tapó el sol creó sus redes sociales.
En el 2020 se fue a vivir a Alemania; trabaja en el campo de los sistemas planetarios y en cuáles son los mecanismos que los forman en el Observatorio Europeo Austral, como parte de, su PhD(c) de Astronomía en la Universidad de Leiden, Holanda. Además justo antes de la pandemia la contactó TXS Plus, la primera emisora especializada en Ciencia y Tecnología, así que todos los lunes dirige su programa “Fuera de órbita”.
Lideró una investigación, que se publicó en la prestigiosa revista The Astrophysical Journal. Junto a Laura Pérez, astrónoma y profesora de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, realizó hallazgos clave para la ciencia. Detectó por primera vez inestabilidades gravitacionales en el nacimiento de un sistema planetario.
Sus referentes fueron su familia, también sus profesoras. “Quizás si yo hubiera visto una científica joven en la tele me habría motivado”, reflexiona. Para Teresa “todas lidiamos con problemas de autoestima. Apoyarnos entre nosotras nos ayuda a armarnos con pensamientos positivos. Entender y trabajar en nuestras inseguridades, así como también rodearse de personas que nos apoyen, es esencial para seguir nuestros sueños. Eres fuerte, eres capaz y eres única. Atrévete a seguir tus sueños”, dice.