Tatyana McFadden es una atleta paralímpica rusa-estadounidense reconocida como una de las mejores corredoras de pista; ganadora de varias medallas de oro.
Nacida con espina bífida, lo que produce inmovilidad en sus extremidades inferiores, Tatyana fue dada en adopción a temprana edad. En un orfanato de su Rusia natal se desplazó hasta los 6 años gateando por la falta de financiamiento para invertir en una silla de ruedas. Deborah McFadden, comisionada del Departamento de Salud y Humanidades de Estados Unidos, la adoptó, junto a Bridget O’Shaughnessey. La niña crecería y se convertiría en atleta.
Al llegar a EE.UU., Tatyana comenzó a participar en diversas instancias deportivas. Durante su etapa escolar sufrió discriminación al no poder correr en la pista atlética junto a los demás jóvenes. Esto bajo la excusa que su silla de ruedas podría causar algún inconveniente en los otros participantes, por lo que debía hacer los circuitos sola sin estar integrada en ningún equipo. La familia de McFadden interpuso una demanda y promovió una ley para la participación de personas con discapacidad en actividades y grupos deportivos.
En los juegos paralímpicos de Atenas fue la atleta más joven al participar con tan sólo 15 años, y obtuvo medalla de plata y bronce. A esto le seguirán los triunfos en los juegos paralímpicos de Pekín, Londres y Río, obteniendo en estas dos últimas instancias siete medallas de oro. A esto se suma su desarrollo desde 2006 en los Campeonatos del Mundo IPC y sus cuatro victorias consecutivas en las maratones de Nueva York, London, Boston y Chicago. Paralelamente a estos encuentros deportivos, Tatyana estudió en la Universidad de Illinois donde no sólo destacó corriendo con su silla, sino que en el baloncesto.
La deportista ha sido reconocida como una de las mejores corredoras paralímpicas, obteniendo distinciones como en 2015 el premio Wilma Rudolph Courage Award y el ser nombrada la deportista mundial del año con discapacidad por la Fundación Laureus, recibió la distinción a mejor atleta con Discapacidad de ESPY (2016) y fue destacada en la lista Forbes como la mejor atleta femenina de los Juegos Paralímpicos de 2016.