Cantante, compositora y poeta, la boricua Sylvia Rexach formó el primer conjunto musical sólo de mujeres de Puerto Rico. Compuso más de cincuenta canciones, escribió libretos para radio y comedias para televisión. Conocida por reinventar los boleros y distinguida por su delicada expresión musical, sus letras han sido interpretadas en variados estilos, tanto por cantantes de Puerto Rico como del extranjero.
Una de los siete hijos de María Teresa González, organizadora de las actividades anuales de carnaval, y Julio Rexach, de ascendencia catalana, creció en un distrito de la Ciudad Vieja de San Juan conocido por su prolífico mundo artístico. Siendo alumna del Central High School de Santurce organizó una orquesta con sus compañeros en la que ella era la pianista. A los 14 años creó dos de sus canciones más famosas: “Di Corazón” y “Matiz de Amor”.
Antes de terminar su educación secundaria compuso “Idilio” que fue interpretada por la orquesta puertorriqueña más famosa de la época, dirigida por Rafael Muñoz. Luego aprendió a tocar la guitarra, el saxofón y otros instrumentos musicales. Se matriculó para estudiar en la Universidad de Puerto Rico, pero cuando empezó la Segunda Guerra se alistó en el Cuerpo Auxiliar Femenino del Ejército de los Estados Unidos (WAAC).
Al término del conflicto se casó y tuvo dos hijas y un hijo. Tras separarse, regresó a Puerto Rico y trabajó escribiendo libretos e interpretando personajes cómicos para la radio. En la década del 40’ fundó “Las Damiselas”, el primer combo en Puerto Rico integrado sólo por mujeres. Cantante y compositora de la banda, recorrieron la isla y Nueva York haciendo presentaciones.
Desde 1951 tuvo su propia columna de crítica cultural en el Diario de Puerto Rico que tituló “A sotto voce”. Cofundó la Sociedad Puertorriqueña de Autores, Compositores y Editores de Música. En 1958, con 36 años, grabó el disco inédito “Sylvia Rexach canta a Sylvia Rexach” producido junto a su amigo el guitarrista Tuti Umpierre. Murió tres años después a causa de un cáncer de estómago.