Originaria de Colombia y nominada a un premio Nobel en el 2008, Nubia Muñoz resolvió una de las grandes incógnitas de la medicina: sus investigaciones permitieron establecer por primera vez al virus del papiloma humano (VPH) como la causa principal del cáncer de cérvix o de cuello uterino, que se diagnostica cada año a más de medio millón de mujeres.
El VPH es el virus de transmisión sexual más común, de ahí la importancia de los descubrimientos de Muñoz, que abrieron perspectivas para su prevención y, a su vez, permitió el desarrollo de tests y la primera vacuna –comercializada en el 2006–, que incluso también es administrada en hombres, pues ellos también se pueden ver afectados (el virus se vincula al cáncer de pene, de ano, de orofaringe (en la boca o la garganta) y a las verrugas genitales).
Nubia estudió Medicina en la Universidad del Valle, en Colombia, gracias a una beca. Allí, también realizó una especialización en Patología. Posteriormente realizó un postgrado en Epidemiología y Virología en la Universidad Johns Hopkins, en Estados Unidos. Más tarde, gracias a otra beca, se fue a Lyon (Francia) para trabajar en el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC). Sus primeros estudios estuvieron centrados en los cánceres derivados de agentes infecciosos. Asimismo, trabajó en el Instituto Nacional del Cáncer en Bethesda, donde investigó el herpes simple tipo 2. Enseguida regresó a la IARC y se centró nuevamente en la epidemiología del cáncer.
Pero no todo en su carrera ha sido éxito. La vacuna del VPH estuvo rodeada de polémica en Colombia, donde el 2015, debido a un episodio masivo, se pensó que tenía efectos adversos. Esto fue aprovechado por movimientos antivacunas y grupos conservadores para desincentivar su uso. Pese a que Nubia culpa a la “desinformación y la ignorancia” por la difusión de falsos rumores, ella sigue luchando e investigando para erradicar definitivamente el cáncer de cuello uterino. Prueba de ello son los innumerables reconocimientos que ha adquirido a lo largo de su carrera que y que la posicionan como una de las investigadoras sudamericanas más importantes.