María Bianchi, más conocida como Miuccia Prada, es la destacada diseñadora de la lujosa marca Prada. Nació en Milán y creció en una familia que tenía una marroquinería -el oficio de trabajar el cuero- llamada Prada y fundada en 1913, y que ya era famosa en el país. Miuccia no siempre estuvo interesada en la moda, de hecho, militó en el Partido Comunista italiano y fue parte del Movimiento Derechos de la Mujer. Se tituló y doctoró en Ciencias Políticas, también estudió Artes Escénicas y se dedicó a ser mimo durante cinco años.
Cuando su madre murió a fines de los años 70, heredó Prada. Por esa misma época se casó con el italiano y actual CEO de la firma, Patrizio Bertelli. En el momento en que heredó Prada, empezó a percibir la forma en que uno se vestía como un acto político y le dio un nuevo sello a la marca; “la ropa puede ser un poderoso instrumento”, diría. Al comienzo no le gustaban los bolsos lujosos, por lo que en 1985 lanzó las nuevas carteras Prada hechas cien por ciento de nylon, que fueron todo un éxito, al igual que su nueva línea de calzado, lo que llevó a la firma al reconocimiento global y abrió tiendas en ciudades como Nueva York, Tokyo, París y Londres.
A fines de los años 80 Prada comenzó a caracterizarse por ser una tienda de diseños sobrios y elegantes gracias al sello de Miuccia. En 1992 la diseñadora decidió atreverse con algo más juvenil e inauguró su nueva marca “Miu Miu” –como le llaman sus cercanos-, inspirada en su propia manera de vestir. La modista y empresaria ha ganado diversos premios como el de Council of Fashion Designers of America, por su línea de accesorios y el de mejor diseñador por el British Fashion Awards. Además, en 1995, fue creada la Fondazione Prada, en Italia, dedicada al arte, la filosofía y la cultura. El famoso Museo Metropolitano de Arte (MET) de Nueva York dedicó una exposición a ella y a Elsa Schiaparelli, otra diseñadora italiana. Actualmente, la firma es parte de Prada Group, un conglomerado del cual Miuccia es co-directora y que reúne a las marcas Prada, Miu Miu, Church’s, Cars Shoe y Pasticceria Marches. No sólo ha llevado el nombre familiar a ser una de las marcas de ropa más importantes del mundo, lo ha hecho con un sello artístico que busca definir a través de la moda, conceptos como feminidad o qué es lo que entendemos por belleza.