Amelia Edwards fue una escritora, periodista y viajera inglesa que no sólo dedicó su vida a sus novelas, sino que se encantó con la antigua civilización faraónica comenzando así un arduo camino de protección que la convertiría en impulsora de la egiptología científica.
Desde pequeña Amelia se desarrolló en múltiples disciplinas artísticas, reflejando a temprana edad su talento para el dibujo y la escritura. Con tan solo 7 años ya había iniciado su producción literaria, publicando durante su adolescencia en diversas revistas. Fue así como se abrió camino en el periodismo en un mundo donde el trabajo en la esfera pública estaba cerrado para el género femenino.
Sus artículos fueron publicados en sitios como el Chamber’s Journal y periódicos como Saturday Review y Morning Post. Así, comenzó a unir al periodismo con su carácter novelista, siendo reconocida por obras como Barbara’s History (1864) y Lord Brackenbury (1880). Además, generó una gran pasión por los viajes, y escribió cuentos con los que retrató sus recorridos.
De estas experiencias nació “Untrodden Peaks”, su primera obra inspirada en el viaje que realizó al norte de Italia. En 1873 emprendió su primer viaje a Egipto, donde se enamoró de la geografía, la antigua civilización faraónica y de la belleza de Abu Simbel, retratando su recorrido en el libro “Mil millas Nilo arriba”, que no sólo portaba escritos de la cotidianidad y cultura del lugar, sino que dibujos realizados por la misma autora.
Al regresar a Inglaterra comenzó a divulgar sobre Egipto y puso en discusión su preocupación por robos y vandalismo hacia templos y elementos propios de la cultura dado el aumento de turistas en la zona. Se convirtió en pionera en la defensa y promoción de la arqueología científica y en 1882, junto a Reginald Stuart Poole, creó la Fundación para la Exploración de Egipto, entidad que tenía un enfoque científico, de protección y difusión de la cultura del lugar. Tras la muerte de Edwards la fundación continúa con su legado hasta la actualidad.